Ayer soñé que un mago (no sé si bueno, no sé si malo) me preguntaba muy paciente:
- ¿Si tuvieras que escoger, para el resto de tu vida, entre el sol y la luna por quién te decidirías?
Aquella pregunta logró intranquilizarme durante toda la noche, porque aún cuando no me desperté jamás, no pude descansar como necesitaba hacerlo... sentía una angustia atroz porque, si bien es cierto el hombre nunca dijo una palabra para obligarme a responder, sus ojos se clavaron en mi rostro esperando discretamente una respuesta que no conseguí articular...
Finalmente hoy en la mañana desperté y, aunque el sueño debía quedar en eso y nada más, pues no logro alejar de mi cabeza a ese hombre y su pregunta.
Supongo que podría (¿sería conveniente?) asociar la escena con el sentimiento tan ¿? que nace al interior de cada uno cuando, entre un millón de posibilidades, debemos elegir a penas una...
f: Nena
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