Yo me imagino que una persona normal despierta con otros pensamientos. Yo despierto pensando en que soy un bulto inútil que una vez más tiene que vivir, cada día, todos los días.
Me paso las horas pensando que finalmente cuando me atreva, la gente a mi alrededor podrá empezar a ser feliz, que su vida empieza cuando yo libere la carga de estar conmigo.
Sé que no es racional, pero es una locura sentir algo más fuerte que lo racional. No me había pasado antes, pero ahora he empezado a preguntarme si quizá también él lo está esperando.
Lo tengo todo, con qué claridad lo veo.
Pero no se es feliz estando a mi lado. ¿Existe? Quizá también están poniendo su felicidad en pausa hasta que yo no estorbe.
Quizá una persona normal no piensa en esto. Estoy harta de ser yo.
¿Algún día podré quitarme esta carga, esta infelicidad, este deseo constante de desaparecer? ¿Se deja de sentir tanto peso?.
Lo peor de todo es que nunca me voy a atrever, voy a seguir atrapada en un cuerpo material. En un pesimismo constante. Queriendo desaparecer y permaneciendo, demorando. Estando aquí, siendo este bulto inútil que se despierta cada mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario